El disgusto provocado por un libro puede hablarnos mal de su autor y cegarnos al resto de su obra. Estimo que insignificancias como Paulo Coelho pueden discriminarse sin temor a provocar consternaciones.
El disgusto provocado por un libro puede hablarnos mal de su autor y cegarnos al resto de su obra. Estimo que insignificancias como Paulo Coelho pueden discriminarse sin temor a provocar consternaciones.
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