Juego de Pomos es un programa en vivo donde varias chicas analizan, con pomo en mano, series, películas y libros que les gustan.
Dibujante con una fuerte inclinación hacia la narrativa de historias a través de sus imágenes, fan de la buena tragazón y los perritos también dirige su propio espacio de exposición.
Ocasionalmente ilustra pero por lo general dibuja lo que se le viene en gana. Es amante de la literatura de fantasía, la crónica, la sátira, lo extravagante y lo grotesco, alcohólicamente sus preferencias se inclinan hacia la cerveza helada, el vino tinto y los martinis de autor de sus compas.
Escritora. Adicta a las series, que son lo más cercano al género novelístico en la televisión. Prefiere la cerveza clara y el vino tinto sobre cualquier otra bebida alcohólica.
Cree que la ficción nos permite vivir muchas otras vidas: ya sea a través de la escritura, la lectura o las buenas series de televisión entre las que cuenta, por supuesto, a Juego de Tronos.
Estudió Letras, es narradora y hace trabajo editorial. Sus libros de cuentos Ensayo de orquesta (FETA, 2017) y Época de cerezos (Paraíso Perdido, 2019) han sido acreedores a un par de premios. Algunos de sus textos han sido publicados en revistas y antologías dentro y fuera de México. Su primera novela será publicada en 2021. Actualmente escribe, desarrolla y asesora proyectos de creación literaria y se nutre de muchísimo contenido pop.
Egresada de la ENPEG: La Esmeralda y del programa educativo SOMA, así como del curso de guión cinematográfico del CCC, ha tomado talleres de FOPROCINE, en la Filmoteca de la UNAM y en Pohualizcalli (Escuela de cine comunitario y fotografía). Orgullosa geek y gamer, colecciona hamacas, vinilos y es fan de Los Simpsons, su sueño es un día hacer una película.
Estudió ciencias de la comunicación y una maestría en producción de cine. Aunque contar historias es su pasión, se tardó años en admitir que lo que realmente quería era ser escritora. Lee de todo menos autoayuda y cree que el arte debería ser accesible. Produce el podcast Femme Normal junto con Edna Montes, donde hablan de sus fandoms, escritoras favoritas y experiencias como feministas, y creó el blog Belleza Libre para promover el fin de las pruebas en animales. La cerveza artesanal es su bebida favorita, y las micheladas no pueden faltar en un día caluroso. Si estuviera varada en una isla desierta, podría sobrevivir con tequila.
(Guadalajara, 1982). Estudió Letras Hispánicas pero no se tituló. Ha escrito el libro de cuentos El triunfo de la memoria y la novela Esto no es una canción de amor, publicados en Paraíso Perdido. Ha colaborado en antologías de cuento como autora y traductora, en revistas y blogs. Anda en bici. Le gustan los gatos. Y la cerveza, el queso y el pan, así que ya hizo paz con que jamás volverá a ser talla chica si quiere seguir siendo feliz. No entiende por qué hay gente que considera a Timothée Chalamet un galán consumado si ya existe, por ejemplo, Jon Hamm.
Bruja, ocultista práctica y descendiente profesional. Estudió periodismo como plan con maña para ser escritora. El terror es su especialidad, pero rara vez lo admite en voz alta porque padece síndrome de la impostora; eso sí, escribe al respecto en Revista Penumbria. Tiene tantos fandoms que ya perdió la cuenta y espera el momento de robarse una TARDIS. Pelea contra el patriarcado un podcast a la vez con Merce Garcés en Femme Normal.
Le gusta tanto beber vino que estudió para Sommelier para tener pretexto. Su destilado de elección es el Whiskey, pero jamás le haría el feo a un buen Gin.
Recibió el vicio en el apellido y no hay mucho que se pueda hacer. Es psicóloga, ajedrecista, acumuladora y ávida lectora. Disfruta de contar ketristesistorias, regar plantas y emborracharse con bebidas refrescantes. No entiende las tecnologías y se viste con las ropas de sus tías difuntas.
Lizeis es una filósofa dibujante de comics. Le gusta seguir perros en la calle, achisparse con unas caguamas y raspar la chancla. Se gasta la vida leyendo historietas, wachando stand up y esperando el ovni.
Liloo ha expuesto de forma colectiva e individual en México y en EU, ha trabajado en libros ilustrados y en desarrollo de videojuegos. Actualmente crea comisiones de ilustración personalizadas y hace colaboraciones con otros artistas para crear objetos ilustrados como libretas, cerámica y prints. En su obra usa las técnicas de tinta china y acuarela, gouache y digital. Su objetivo es crear mundos completos llenos de detalles que cuentan historias.
Programadora que ha viajado a través de varios niveles laborales, ha participado en varias comunidades desde videojuegos, programación hasta el actual tecnología y emprendimiento para la mujer. Comenzó tomando unas caguas banqueteras en bolsita y con popote, pero dejó esa vida para unirse al sector de cerveza artesanal, actualmente se le encuentra pidiendo cualquier «sour» o «berliner» en cualquier bar de caché hipster.
Ingeniera de oficio, le encanta la tecnología aunque le da algo de miedo la robótica humanoide.
Es fan de la cerveza (sobre todo las red ale e IPAs), le encanta comer y combinar estas dos actividades para compensar la tortura a su cuerpo después de entrenar para maratones (se cree que tiene algo de masoquista).
Le encanta viajar ya sea físicamente o través de páginas y pantallas.