Más allá de likes o visitas a nuestro sitio web, lograr una buena presencia en internet se mide con lo que nosotros determinemos para nuestro proyecto. Aquí una breve guía genérica.
1. Entender que la presencia en internet establece canales de comunicación con las personas, mismas que pueden convertirse en clientes si creamos confianza y lealtad haciendo que nos conozcan.
2. Aprovechar que el costo de anunciarse en internet y redes sociales es tan bajo como uno lo desee, llegando a mercados específicos y medibles.
3. Conocer las diferentes herramientas para monetizar nuestros productos y servicios y la manera en la que se mueven los contenidos en internet para facilitar que sean compartidos.
4. Nutrirse del contacto directo en redes sociales y la retroalimentación que nos proporcionan nuestros seguidores para mejorar nuestros productos y servicios.
5. Identificar maneras de formalizar la presencia en internet. Se puede tener de todo pero es mejor elegir hasta dónde le invertimos tiempo a cada cosa: sitio web, correo web corporativo, boletín, Google Maps, tienda en línea, etc.
6. Conocer que un proceso de ventas en general se parece a un embudo en donde en la parte más amplia entran todos los contactos, de esa población total una fracción se convertirá en prospectos y de esos una mínima en clientes. De esos clientes tenemos que preguntarnos de manera habitual ¿cuántos nos vuelven a comprar? ¿cuántos nos recomiendan con sus amigos? ¿qué hacemos para contactarlos y darle seguimiento a cada uno?
7. Repensar las cosas: ¿qué quieres vender? ¿a quién? ¿es adecuado su precio? ¿estás cubriendo una necesidad? Hay productos más comerciales que otros, ¿vendo productos baratos y gano por volumen? ¿o vendo productos caros a unas cuantas personas? ¿puedo abarcar los dos mercados?
Créditos de la imagen que ilustra este texto: M.C. Escher.
Pasó para impetuosa: Jos Velasco.